¿Entrenar si tengo una lesión?

Lesión cuello

Hacer deporte o ejercicios específicos durante el proceso de readaptación de una lesión puede tener varios beneficios, siempre y cuando sea realizado bajo la supervisión de un profesional de Ciencias del Deporte. Algunas razones por las que es bueno hacer deporte o ejercicios durante el periodo son las siguientes:

  1. Mejora del riego sanguíneo y la circulación: La actividad física moderada puede estimular el flujo sanguíneo y la circulación en la zona afectada, lo cual favorece la entrega de nutrientes y oxígeno necesarios para la recuperación de los tejidos lesionados.

  2. Mantenimiento de la movilidad articular: El ejercicio terapéutico puede ayudar a mantener y mejorar la movilidad de las articulaciones cercanas a la lesión. Esto es importante para prevenir la rigidez y la pérdida de rango de movimiento.

  3. Fortalecimiento muscular: A través de ejercicios específicos, es posible fortalecer los músculos que rodean la zona dañada. Esto puede contribuir a la estabilización de la articulación y reducir el riesgo de futuras lesiones.

  4. Prevención de la atrofia muscular: Durante el periodo de inactividad debido al daño, los músculos pueden sufrir atrofia, es decir, debilitamiento y pérdida de masa muscular. La actividad física controlada y adaptada puede ayudar a contrarrestar este efecto negativo.

  5. Rehabilitación funcional: Realizar ejercicios que imiten las demandas funcionales del deporte o actividad específica en la que se lesionó el individuo puede ayudar a recuperar la fuerza, la resistencia y las habilidades motoras necesarias para retornar lo antes posible a la rutina; bien deportiva o de vida.

Es importante destacar que el tipo y la intensidad de los ejercicios deben ser prescritos por un profesional de Ciencias del Deporte, como hacemos en Parda entrenamiento personal en Santander y online, teniendo en cuenta la naturaleza de la lesión, el estado de recuperación y las capacidades individuales de cada persona.